La reciente desclasificación de los archivos Secretos de las FF. AA. (Fuerzas Armadas de Argentina) de la Guerra de las Malvinas deja al descubierto detalles del plan para silenciar a los soldados a su regreso al continente. Se estableció un cuidadoso programa de ocultamiento que fue diseñado por el aparato represivo del Estado durante la dictadura.
Se repartieron “cartillas de recomendaciones” entre los soldados que volvían al continente tras la guerra con el siguiente mensaje:
“Usted luchó y retribuyó todo lo que la Patria le ofreció: el orgullo de ser argentino. Ahora la Patria le requiere otro esfuerzo: de ahora en más usted deberá no proporcionar información sobre su movilización, lugar de presentación, arma a la que pertenece o aptitud adquirida y su experiencia de combate…”. Entre otras “sugerencias”.
El texto secreto, que ahora sale a la luz, de junio de 1982 lleva la firma del subjefe II de Inteligencia del Batallón 601 del Ejército, el coronel Mario Davico, que anteriormente había participado en movimientos de terrorismo de estado.
Se creó una campaña de “acción psicológica” entre la sociedad argentina para controlar la información. Se llamó a varios generales retirados para que se paseasen por los diversos platós de las principales cadenas de televisión argentinas para calmar a la nación y ofrecer su “opinión” sobre los acontecimientos.
El teniente coronel Sierra, Jefe del Departamento de Acción Psicológica de la Jefatura II de Inteligencia del Comando en Jefe del Ejército, procesado en 2012, por la privación de libertad de 21 personas y 14 homicidios, quería lograr un cambio de imagen tras la guerra. Comenzó con una campaña de “divulgación de reconocimientos y reparaciones que el Estado contempla para los heridos, muertos y desaparecidos en esta gesta heroica del Ejército” y “operaciones psicológicas secretas mediante el empleo de diferentes técnicas y procedimientos”.
Ernesto Alonso, ex-combatiente en esta guerra, afirma que “personajes siniestros como Davico y Sierra diseñaron junto a otros un plan de ocultamiento y de silenciamiento para ‘invisibilizar’ a los soldados impartiendo órdenes amenazantes”.
Al volver al continente, lo que los soldados supervivientes necesitaban era volver junto a sus familias y descansar, pero ocurrió justo lo contrario. Según los archivos desclasificados las consecuencias de privarles de libertad a los soldados produjo un número de suicidios similar al número de fallecidos durante la guerra.
La Presidenta Cristina Fernández de Kirchner ordenó a través del decreto 503/15 la desclasificación de toda la documentación vinculada a Malvinas que se encontraba en los Archivos de las Fuerzas Armadas. Los documentos obtenidos fueron estudiados por un grupo de investigación dependiente de la Dirección Nacional de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario. Entre los documentos se encontraron diarios de guerra, informes de inteligencia, fotografías…
Ángela Rodríguez Terán