El presente artículo está centrado en la conservación de documentos digitales.
El autor menciona a Rothenberg, el cual considera que la forma de preservar estos documentos es similar a la de los textos en formato papel, pues o bien se copia a su idioma original o bien se traduce, y para esto no dependemos del formato en el que se encuentren los documentos. En ambos casos hay que plantear políticas de actuación y existen múltiples proyectos que, al final, comenta.
Los proyectos que están planteados actualmente se centran en información administrativa fundamentalmente, pero el autor considera que esto se debería hacer con todo tipo de expresión cultural, desde las imágenes a los videojuegos. Considero que tiene toda la razón porque actualmente nos expresamos de formas muy variadas, y para poder preservar nuestra memoria habrá que conservar todo tipo de información.
La preservación digital tiene que contemplarse desde diferentes puntos de vista, pues dependemos de la tecnología. Por ello, según el autor, la preservación digital ha de basarse en la de los soportes de almacenamiento y en la actuación que evite que el avance tecnológico deje inaccesible la información digital, ya sea mediante migración, emulación, conservación de la tecnología u otros métodos que explica con detalle. Todo ello cumpliendo tres puntos de garantía que aseguren: originalidad, autenticidad y la integridad del objeto de información o de la información misma.
Aquí es donde los metadatos son cruciales, pues deben poseer aquella información esencial para el desarrollo adecuado de las actuaciones que hay que seguir en las tareas de preservación. Proporcionarán información de diversa índole: sobre el tipo de formato, modificaciones realizadas sobre el mismo y otras informaciones relevantes. Nos presenta los tipos de metadatos conservacionales propuestos por el CIA (Consejo Internacional de Archivos) y sus particularidades.
Para la disposición de los metadatos y su tratamiento se plantean dos posibilidades: embeber esa información en el propio documento, o bien crear un documento independiente para el almacenamiento de los metadatos, vinculado al original. Existen proyectos desde los dos puntos de vista. Así, el autor explica diferentes proyectos en los que el empleo de metadatos es fundamental para la conservación de documentos digitales: Dublin Core Metadata Initiativa Preservation Working Group, Premis Working Group, The Cedars Project. Metadata for digital preservation,The National Library of New Zealand, o el proyecto de Library Of Congress.
Si estáis interesados en el artículo:
CANDÁS ROMERO, J. 2006. El papel de los metadatos en la preservación digital. El Profesional de la Información, vol. 15, no. 2, pp. 126-136. ISSN 1386-6710.
Beatriz Mimosa