En este post acercamos un tipo de archivo encargado de preservar, conservar y difundir información y materiales del colectivo LGTB en Australia. Se constituyó en el año 1978 tras celebrarse el 4th National Homosexual Conference en Sidney, donde se fraguó la importancia de su existencia y sus competencias. Desde entonces han ido formando una colección considerable, con 150.000 documentos de archivo, componiendo así el fondo más extenso sobre material referente al colectivo LGTB australiano, suponiendo un importante centro de información para conocer más sobre su historia.

Sus objetivos se basan en preservar los materiales y documentos de archivo que mejor representen las vidas de lesbianas, gais, bisexuales, transgénero o queer; también servir de apoyo para transmitir valores y aportar un punto de vista de diversidad desde distintos canales como talleres, exposiciones y publicaciones e informes.

Para facilitar más la visibilidad del archivo, las colecciones se transforman en recursos útiles a través de conferencias dirigidas a alumnos, profesores y sectores profesionales diversos; premian la mejor tesis que trate el tema LGTB; días de puertas abiertas, así como un servicio especializado en ofrecer información a investigadores, para documentación audiovisual en documentales, etc. Destacan las series de recortes de periódicos y scrapbooks digitalizados y visibles en la plataforma Issuu (https://issuu.com/australianlesbianandgayarchives), así como pequeñas biografías e hitos en la comunidad LGTB (http://alga.org.au/the-collection/history-bites). En este sentido, colaboran con la Universidad de Monash para la formación en digitalización de los profesionales y tener más posibilidades de ofrecer un mejor acceso a través de la web a contenidos que pueden resultar de interés a nivel internacional.

Ana García García

La época Victoriana se caracterizó por el auge de Gran Bretaña, como un estado poderoso a cargo de la reina Victoria I. Durante esta época se produjo la Revolución Industrial Británica e importantes avances científicos. Pero, ¿en qué posición quedaba el papel de las mujeres en una sociedad que parecía avanzar a pasos agigantados? Pues empezó su andadura por buscar una posición más fuerte y hacerse valer ante el sometimiento de una cultura rígida y patriarcal, aunque dependía en muchas ocasiones de la clase social a la que perteneciera. Eso sí, el punto común a todas ellas era la idea de que la mujer se encargara del cuidado de los hijos, con la diferencia de que en la clase alta la mujer debía cuidar su imagen. Por el contrario, la clase baja tan solo pensaba en buscar trabajos (con un sueldo irrisorio y en condiciones pésimas) para poder sustentar a toda una familia, pues con el trabajo del marido no bastaba. Sin embargo, un hecho bastante importante fue la Ley de Propiedad aprobada en 1887, por la que si se divorciaban, ellas seguirían teniendo derecho sobre sus hijos y propiedades (hecho que ocurría muy pocas veces y en todo caso en la alta burguesía).

En este contexto, la creencia de la burguesía residía en ocultar los sentimientos y acallar cualquier acto de rebeldía. En contraposición, la literatura supuso una ventana para muchas personas, reflejando en la poesía la situación social y política, así como la novela narrativa donde Dickens, entre otros, desafiaron las restricciones impuestas por los moralistas (temas como la prostitución o la sexualidad eran censurados). Fue entonces cuando un grupo de mujeres tomó esta forma de expresión para dejar constancia de otra perspectiva de la realidad, por ello la Universidad de Indiana creó en el año 1995 un proyecto para dar visibilidad a muchas de esas narraciones del siglo XIX.

Algunas escritoras no están reflejadas, debido a que se basan en aquellos textos que poseen, por ello quedan fuera novelistas como Frances Trollope, la cual consiguió destacar en la ficción, y George Eliot en el campo de la filosofía. Pese a ello, el proyecto sigue introduciendo y transcribiendo una gran cantidad de textos (poesía, relatos, cuentos infantiles, ensayo…) de autoras como las hermanas Brönte, Lady Wilde (esposa de William Wilde, no de Oscar Wilde), Amy Levy, Dinah Craik, Alice Meynell, y un largo etcétera.

Cabe destacar que el proyecto empezó con una codificación de los datos por medio del Standard Generalized Markup Language (SGML) y que prosiguió hasta convertir muchos de los archivos a lenguaje XML, debido a que se enmarca en el desarrollo de Text Encoding Initiative (TEI), un campo abierto en las humanidades digitales para la codificación de textos. Asimismo, los 200 textos originales están alojados en un repositorio digital denominado Xubmit, gestionado por la IU Digital Library Program.

Desde el siguiente enlace (http://webapp1.dlib.indiana.edu/vwwp/welcome.do) podemos realizar diferentes búsquedas por autor, título, género literario, así como acceder a una línea del tiempo que permite observar hechos importantes relacionados con la mujer y la literatura en la época Victoriana. La presentación de cada texto está descrita como un registro catalográfico, con la diferencia de que en este caso proporciona el texto completo transcrito para su lectura digital, e incluso su descarga en diferentes formatos (PDF, XML etc.).

Ana García García

Desde el Archivo Nacional de Chile se ha organizado la exposición “Nos/otras. En la calle, en la casa y en la cama” para dar difusión a los documentos que dejaron constancia de las organizaciones feministas y opositoras a la dictadura de Pinochet en la década de 1980. Para ello la muestra recoge revistas, boletines y folletos para complementar las tres visiones que intentan representar, cómo es la mujer en las manifestaciones y lucha en la calle, su papel en casa y por último los problemas en torno a la violencia sexual, la sexualidad, el aborto y la maternidad.

Los materiales utilizados han sido elegidos de los fondos del Instituto de la Mujer, provenientes de las organizaciones “Isis Internacional” y “La Morada”. Al mismo tiempo, se han seleccionado fotografías del Archivo fotográfico de Fortín Mapocho y un registro audiovisual perteneciente al  Archivo Mujeres y Género, el cual forma parte del Archivo Nacional de Chile y que recoge documentos de la segunda mitad del siglo XX. En relación a esta idea es interesante la entrevista realizada a María Eugenia Mena (https://www.youtube.com/watch?v=bG9O-rGKoNE) la cual explica con más detalle los entresijos de la creación de la exposición, así como la finalidad de la misma, para no solo dar a conocer lo que ocurrió sino también para que sirvan de fuentes de investigación y reflexión sobre la situación social actual.

Como Chile no cae precisamente cerca, ofrecemos un enlace para poder observar a través del canal de Youtube de su Archivo Nacional (https://www.youtube.com/watch?v=CQ2ylG87_8A) todas las novedades y actividades que se vayan publicando en relación a esta exposición.

Ana García García

El día 8 de marzo se celebró el Día Internacional de la Mujer, cuyos orígenes no son claros puesto que, a principios del siglo XX, se produjeron una sucesión de hechos sangrientos en las reivindicaciones obreras y en la lucha por el voto de la mujer. En cada país se empezó a festejar este día en diferentes fechas. Sin embargo, en Rusia ya se llevaba celebrando el 8 de marzo desde la Revolución Rusa de 1914, volviendo a tomar fuerza en 1917 a causa del amotinamiento de las mujeres rusas por la falta de alimentos. Estos sucesos fueron el desencadenante de fijar este día en el calendario a nivel internacional. En la actualidad, el 8 de marzo está orientado para dar visibilidad a la búsqueda de la igualdad, justicia y paz en todos los ámbitos, por medio de la realización de actividades en diversas ciudades.

En esta ocasión destacamos Madrid, donde se han realizado diferentes eventos para conmemorar durante todo el mes diferentes perspectivas relativas al papel de la mujer en la sociedad actual y en la historia. Entre ellos resaltamos la exposición de la Hemeroteca Municipal de Madrid, “Ellas, las sufragistas”, dedicada al movimiento femenino por la igualdad en derechos sociales y políticos. Se han seleccionado diferentes imágenes de sus fondos para representar la lucha que llevaron a cabo las mujeres a principios del siglo XX, hasta que en el año 1931 las españolas pudieron votar y conseguir plenos derechos.

Esta exposición se mantendrá hasta el 12 de abril de 2016 en el vestíbulo principal, con entrada gratuita.

 Ana García García

La aplicación para sistemas Android “Palabra de Mujer” es una iniciativa que propone compartir el pensamiento femenino generado a lo largo de la historia. Ha sido desarrollada por la Asociación Mujer, Ciencia y Tecnología de La Rioja, con la colaboración de la Asociación Feminista Laguz.

El motivo que llevó a la creación de este recurso fue una investigación de la Universidad de Valencia, en la que se concluyó que solo se estudia en las escuelas un 7’5% de figuras femeninas. La presidenta de la Asociación Laguz defiende esta nueva manera de reconocer a las mujeres de la historia como una manera original de dar luz a los pensamientos que han permitido conseguir ciertos logros y avances, con el fin de que no caigan en el olvido. 

El funcionamiento de la aplicación es sencillo, pues aparecen las citas de forma aleatoria con tan solo pulsar sobre la pantalla. Una característica muy interesante es que se mezclan citas de mujeres de diversas partes del planeta, además de movimientos feministas en diversos ámbitos. Es posible buscar por categorías, autoras o frases concretas. También aporta una pequeña biografía de cada personaje.

El fin último es poder compartir con otras personas estas ideas, y hacer así de la tecnología una herramienta útil para transmitir conocimiento e inspirar a nuevas generaciones de todos los campos profesionales. Por ello la aplicación “Palabra de Mujer” no es estática, intenta ser un proyecto colaborativo. Sus creadoras promueven la aportación de más autoras y sus correspondientes citas. Se puede descargar de forma gratuita desde  http://www.palabrademujer.es/

Ana García García

Hoy en día la Medicina ha avanzado mucho, pues los profesionales tienen la capacidad de reconstruir partes del cuerpo, ya que en la actualidad incluso existen extremidades biónicas. En tiempos de la Primera Guerra Mundial, la necesidad de integrarse a la vuelta de la guerra con mutilaciones y pérdida de parte de la cara era un problema para los militares.

20.000 soldados perdieron parte de su cara a causa de la metralla. Podían sobrevivir, pero el daño era visible. Este hecho les llevaba a refugiarse en su casa, avergonzados de su aspecto, obligados a escoger oficios donde no se les viese. A este problema quiso poner solución la protagonista de este post, Anna Coleman Ladd. En 1917 leyó los artículos de Dewert Wood en la revista The Lancet. Sus primeros experimentos con máscaras fueron la inspiración necesaria para aplicar sus técnicas escultóricas.

Por el hecho de ser mujer tuvo muchas más dificultades para establecerse. Su marido, Maynard Ladd, fue designado director de la Oficina del Niño en Toul, y gracias a esta condición pudo abrir en 1917 el Estudio de Máscaras para la Cruz Roja Americana en París.

Mediante fotografías antiguas y entrevistas, preparaba el que iba a ser el futuro rostro, con una expresión facial permanente. El proceso podía decirse que era un poco asfixiante, entre moldes de yeso, arcilla y plastilina, hasta que por fin enviaba el modelo para hacerse en cobre galvanizado. Podían llegar a pesar unos 250 gramos, y eran pintadas con esmaltes para parecerse al tono de piel. Incluso podían personalizarla con barba, bigote…Esta ayuda supuso una subida de autoestima para estos hombres, huyendo de los estigmas sociales.

Las máscaras hoy en día no se conservan, el material se degradó por el uso, pero el Instituto Smithsonian en Washington D.C. tiene una colección con diarios, fotografías, una filmación y los documentos publicados por Anna Coleman, disponible en el siguiente enlace: http://www.aaa.si.edu/collections/anna-coleman-ladd-papers-10600/more

Ana García

Este mes está repleto de promesas, debates, mítines… El 20 de diciembre es el día de las Elecciones Generales, y dos días antes, el 18, se estrena la película Sufragistas, la cual viene “al pelo”. La directora, Sarah Gavron, ha propuesto en su película reflejar los sucesos violentos y cambios por el derecho al voto femenino a principios del siglo XX, movimiento liderado por Emmeline Pankhurst. En este caso, la película tiene un reparto conocido: Meryl Streep, Helena Bonham Carter, Carey Mulligan, Ben Whishaw o Brendan Glesson, entre otros.

La directora, junto a su equipo, ha compartido la pasión por retratar una historia que ha sido camuflada como un proceso pacífico tras la constitución de la National Union of Women’s Suffrage Societies. Dado que este proyecto estaba en la cabeza de la directora y sus acompañantes desde hacía más de 6 años, han recopilado información de diverso tipo. Primero una selección de las películas y documentales que han recogido este tema, cada uno desde un punto de vista diferente. También han tenido en cuenta la exposición de materiales de la campaña de Suffragettes por la institución National Archives de Gran Bretaña en 2003 (hoy accesible en su página web).

Sarah y su equipo consiguieron acceder a escritos de las propias mujeres que participaron en el movimiento, pertenecientes al London Museum, gracias a la colección Suffragette Fellowship custodiada por Beverly Cook, así como a una serie de carteles, objetos simbólicos del movimiento, etc.,  proporcionados por The Women’s Library.  

No solo necesitaban para crear los personajes hechos que reflejasen la historia, también fotografías para poder caracterizar a los actores, así como diseñar el vestuario y escenografía. De este modo, Sarah Gavron recurrió a la colección de fotografías recopiladas por Diane Atkinson para crear el ambiente idóneo de la historia.  Debían reflejarse detalles realistas, ya fueran periódicos, sombreros, peinados… Para ello también recurrieron a las noticias de ese periodo de tiempo, en el Daily Express, Illustrated London News, Daily Mirror, etc., aunque tampoco olvidaron las publicaciones más afines al movimiento, Votes for Women y The Suffragette. Otros centros que les proporcionaron la información necesaria fue British Pathé, con un importante fondo sobre noticias de la época (como la muerte y funeral de Emily Wilding Davison, militante que se arrojó contra el caballo del rey Jorge V), British Film Institute o Getty and Gaunt International Archives.

Hacer esta película supuso un auténtico trabajo de investigación previo, que no hubiera sido posible si no existieran centros especializados en custodiar, recuperar y difundir información, la cual hoy en día nos sigue recordando que los derechos de las personas a veces han tenido que ser peleados por movimientos sociales.

Ana García García

En esta ocasión tratamos de acercar una manera diferente de conocer la memoria de la sociedad. Se trata de un proyecto llevado a cabo en Cataluña, a través del archivo oral de Memorial Democràtic, y del cual resaltamos en este post el proyecto denominado Memòries en femení. El objetivo es poner cara y dar voz a mujeres sobre su visión y recuerdos de la Segunda República, la Guerra Civil, su presencia en la lucha por libertades democráticas, etc.

La naturalidad de las entrevistadas y los diversos temas que abarcan, como por ejemplo, la educación, la constitución de las familias, los tipos de trabajos o los tabúes en ciertos temas, hacen que el formato por medio de entrevista aporte un valor interesante y original.

Gracias a esta herramienta, investigadores y estudiantes pueden tener un apoyo audiovisual en sus trabajos. Asimismo, todo tipo de público puede escuchar partes de la historia jamás contada en los libros de texto. Por lo tanto, podemos conocer desde cualquier rincón los cambios sociales y políticos, al mismo tiempo que queda constancia de la realidad que vivían las mujeres en años tan convulsos de la historia.

Otra característica importante de dicho proyecto es que aboga por conseguir el mayor número posible de fondos sonoros y registros audiovisuales, para dejar constancia de la vida de personas cuyo valor puede llegar a ser interesante de cara a la investigación.

Pueden acceder a todos los testimonios de estas mujeres desde el siguiente enlace: http://bancmemorial.gencat.cat/web/search_advanced/?proyecto=3&informant=&lugarN=&municipioID=&idioma=&filtro=y

Ana García García